domingo, 15 de febrero de 2015

NIÑOS AFRICANOS



 Dejan huella en la mirada, mirada frías de amores,
niños que viven deprisa, sin techo que les arrope,
caminos largos y yelmos, ríos que parecen mares,
una piedra a cada paso, a un paso de no ser nadie .

Desharrapaos del futuro, futuro que ya ha pasado,
la vida huyendo de ellos, ellos huyendo del fango,
sequía en sus ojos negros, barros secos, secos lagos,
desgarrados de por vida, harapientos, despojados.
Vidas huérfanas de estrellas, hijos de odios ajenos
que los van acorralando a callejones de invierno
donde mueren los colores, los amores, los te quiero,
callejones que conozco, los recorrí... los recuerdo.
              
Ese campo, ese desierto, ese atajo, esta rabia,
este calor que me abrasa, esta paz acorralada
es pesadilla en mis sueños, sueños que matan el alma.
Unos niños callejeros, dejan huella en mí mirada.  

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